Gerardo Werthein, el nuevo canciller del gobierno de Javier Milei, cumplirá 69 años el próximo 3 de diciembre. Su llegada al cargo se dio inmediatamente después de la controvertida salida de Diana Mondino y mientras desempeñaba funciones como embajador argentino ante los Estados Unidos.
Su trayectoria a nivel empresario es larga, como una de las caras visibles del Grupo Werthein, una familia rusa de origen judío que se asentó en el país a principios del siglo XX y que se consolidó luego como uno de los holding más importantes que tuvo a su cargo, entre otras empresas, la de telefonía Telecom, años en los que Gerardo fue una de las caras visibles más importantes de la compañía, de la que fue vicepresidente.
Werthein es veterinario, recibido en la UBA y de esa formación adquirió su pasión por la actividad ecuestre, practicando primero equitación y luego siendo dirigente deportivo al frente de la federación de dicha disciplina. Además, la familia Werthein nuclea negocios que van desde la agricultura, la industria alimenticia, energía, la salud y los desarrollos inmobiliarios hasta las telecomunicaciones media tech.
El Grupo Werthein tiene más de 1.500 empleados y 8.500 colaboradores indirectos que trabajan con las distintas empresas del holding.
Su patrimonio y sus vínculos
Es dueño del Haras El Capricho, cuya fiesta hípica fue cita anual para ricos y famosos, parece un buen nexo entre el mundo de los negocios internacionales y la política. Además, tiene negocios en Uruguay donde es accionista del diario El Observador.
En paralelo, Werthein llevó adelante una carrera ascendente dentro del deporte olímpico, primero como dirigente deportivo y luego al frente del Comité Olímpico Argentino, cargo en el que se desempeñó de 2009 a 2021. Esa experiencia le terminó de dar un roce internacional con actores de la política y el empresariado global. Sigue formando parte del directorio del Comité Olímpico Internacional y está al frente de una de las vicepresidencias.
En sus años de titular del Comité Olímpico fue quien aggiornó la estructura de una entidad centenaria y promovió, por caso, que un impuesto a la telefonía celular financiara el deporte amateur. En simultáneo, fue titular del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD).
Gerardo Werthein, cuando fue elegido vicepresidente del Comité Olímpico Internacional.Con la llegada de Javier Milei a la presidencia de la Nación, fue designado como embajador ante los Estados Unidos, socio comercial clave de la Argentina y con el que el Gobierno busca restablecer lazos perdidos en términos de relaciones exteriores durante el kirchnerismo. Esa misión, según la Casa Rosada, la cumplió de buena manera en estos meses de gestión, promoviendo además la llegada de inversiones.
De allí que a partir de la postura de Diana Mondino de votar a favor de Cuba en la ONU, se haya decidido que Werthein sea su reemplazante. El pliego de Werthein como embajador ante Estados Unidos había sido validado en el Congreso en abril de este año.
Werthein supo anudar una relación con el líder de La Libertad Avanza por intermedio de su hijo Gregorio, que compartió estudios y actividades laborales con el mandatario. De hecho, padre e hijo se apersonaron en la planta baja del Hotel Libertador durante la noche del 19 de noviembre del año pasado en la que Milei fue ungido como presidente electo.
Su gestión como embajador y la foto con Biden
En junio, Werthein le presentó sus cartas credenciales como embajador al presidente estadounidense Joe Biden. “Fue una ceremonia muy linda”, dijo Werthein a Clarín en ese momento, sobre el acto. El empresario había obtenido semanas atrás el plácet del gobierno de Estados Unidos, pero el otorgamiento de las cartas credenciales le da acceso total a todas las dependencias oficiales de la administración estadounidense.
Sobre su reunión con Biden, Werthein contó que se dieron la mano, que hablaron brevemente sobre temas de la relación bilateral, sin dar más detalles por cuestiones de confidencialidad. Luego llegaron las fotos de rigor, que fueron luego entregadas por la Casa Blanca.
Werthein, junto a Joe Biden.Werthein había estado en esos días en el foco de atención en Argentina por una instantánea en el marco de la reunión de los jefes de Estados de las grandes potencias, el G7, en Italia, donde se lo vio hablándole al oído a Biden. El empresario había ido a acompañar al presidente Javier Milei en su primera incursión en este foro y se lo vio muy activo allí. Milei, conocido promotor de la candidatura del republicano Donald Trump, y Biden, tuvieron su primer cara a cara en el esa reunión.
Ya en ese entonces se hablaba del posible desembarco de Werthein en Cancillería para reemplazar a Mondino. cambios en el gabinete. Sobre el tema, le había señalado a este diario que “no estoy para hablar de política” y que ponía su foco en su tarea como embajador. El empresario explicó además que conocía a Biden desde hace muchos años, cuando era vicepresidente de Barack Obama y él miembro del Comité Olímpico Internacional.
Además, fue parte de la comitiva presidencial que este año organizó uno de los encuentros entre Milei y el empresario Elon Musk, reconocido seguidor de las políticas libertarias que lleva adelante el presidente argentino.
Werthein, con los Milei y Elon Musk.Sus primeras palabras como canciller
Recién asumido, Gerardo Werthein realizó declaraciones. «Agradezco al Presidente Milei por el honor y la confianza otorgados. Estoy comprometido a trabajar por el bien de Argentina y de todos los argentinos, fortaleciendo nuestra presencia en el escenario internacional», sostuvo el nuevo canciller.
Además, se alineó por completo al jefe de Estado al sostener: «En nuestro país, hay una sola política exterior: la que define el Presidente, y todo el equipo de la Cancillería estará alineado con esa visión. Modernizaremos nuestra diplomacia y optimizaremos los procesos para que Argentina brille en la escena global, asegurando una transición ordenada. Trabajaré siempre junto al Presidente por el bienestar de todos los argentinos.”