Los operativos actuales se concentran en el microcentro, donde ya se intervinieron cerca de 50 cuadras. Las tareas incluyen el despeje de luminarias y cables, la extracción de ramas secas y de especies invasoras como el tulipanero africano. “Queremos que los árboles tengan su mejor desarrollo en primavera-verano, y que la ciudad sea más segura, con una mejor iluminación”, remarcó Meza.
El funcionario recordó que las podas en la vía pública son responsabilidad exclusiva del municipio, por lo que los vecinos no deben intervenir por su cuenta. Para realizar pedidos, se encuentra disponible el Centro de Atención Digital en la página oficial de la municipalidad, donde se puede solicitar poda, extracción o retiro de ramas. También se mantiene una línea telefónica para personas mayores o con dificultades tecnológicas.
Además, aclaró que los árboles que son intervenidos este año no podrán ser podados nuevamente hasta dentro de dos años, y que cada pedido se gestiona mediante tickets que permiten un seguimiento digital. “Todo queda registrado”, afirmó Meza.
Por fuera del casco céntrico, los operativos se desarrollan los lunes, miércoles y viernes. Y si bien el municipio no realiza tareas dentro de domicilios privados, se pueden evaluar excepciones en casos puntuales de adultos mayores o personas con discapacidad.