El yoga se convirtió en una de las prácticas más recomendadas para combatir el estrés y mejorar el bienestar general. Esta antigua disciplina, que combina posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación, no solo promueve la flexibilidad y la fuerza, sino que también proporciona un espacio para la relajación mental y emocional. A medida que las exigencias diarias aumentan, más personas buscan en esta disciplina una herramienta efectiva para encontrar equilibrio y paz interior. Sobre esto, se dan a conocer las cinco posturas más recomendadas para potenciar el cerebro y así mejorar la calidad de vida.
Según lo que se dio a conocer en la revista CQ, los expertos sugieren una serie de posturas de yoga específicamente diseñadas para estimular la actividad cerebral. Estas posturas pueden ayudar a mejorar la concentración y la claridad mental, y también promueven la circulación sanguínea en el cerebro.
La Sukhasana, o postura fácil o cómoda, es una postura de yoga simple que se realiza sentado y que con frecuencia se utiliza para la meditación. Esta “puede desencadenar la respuesta de relajación del cuerpo, reduciendo la producción de hormonas del estrés como el cortisol. Además, puede conducir a una mayor sensación de calma y paz interior cuando se practica con regularidad. La Sukhasana también favorece una buena postura, lo que puede mejorar la concentración”, mencionó Aman Puri, experto en fitness y fundador de Steadfast Nutrition.
Postura de la cabeza erguida (Sirsasana)
Las posiciones invertidas son de las más recomendadas acciones de yoga para retener mejor la memoria, aumentar la capacidad de atención y mejorar la concentración. “Yo recomendaría la Sirsasana o postura de la cabeza. Es genial porque ayuda a invertir el flujo sanguíneo. Esta postura también calma el cerebro y el sistema nervioso. Además, descansa la parte inferior del cuerpo y fortalece la parte superior. Aunque la Sirsasana es una posición avanzada, los principiantes pueden probar la versión Iyengar o la Sirsasana de la cuerda para incluirla en su rutina”, mencionó Pragya Bhatt, profesora de yoga y autora de Beyond Asanas.
Los especialistas en salud destacan que la Padahastasana puede beneficiar la salud del cerebro de diversas maneras. Esta postura estimula la circulación sanguínea, lo que a su vez mejora la función cerebral y la agudeza mental. Además, ayuda a calmar la mente y activa la respuesta de relajación, lo que reduce los niveles de estrés y ansiedad. También potencia la concentración y la atención, facilitando la realización de tareas que requieren enfoque mental.
Por otro lado, fomenta la plasticidad cerebral, lo que podría mejorar la memoria y las capacidades cognitivas. Finalmente, esta postura contribuye a una mayor conciencia corporal y alivia la tensión en el cuello y la parte superior de la espalda, promoviendo así el bienestar mental.
Postura del árbol (Vrikshasana)
Practicar la Vrikshasana diariamente es una forma efectiva de mejorar la atención, la concentración, la memoria y la claridad mental. Según Khushboo Jain Tibrewala, nutrióloga y fundadora de The Health Pantry, esta postura combate la “mente de mono” y la falta de atención, problemas que afectan nuestra memoria y capacidad de resolución de problemas. Al mantener la postura, se requiere enfocar completamente la atención en los músculos y en un punto fijo, lo que promueve la presencia en el momento. Además, la Vrikshasana mejora la circulación, beneficiando la función cerebral.
La práctica regular de Sarvangasana, también conocida como la postura de los hombros, contribuye significativamente al bienestar físico y mental. Asimismo, nutre el cerebro, mejora la memoria, calma la mente y reduce el estrés y la ansiedad, lo que resulta esencial para potenciar la agudeza mental y la creatividad. La doctora Manjula, médica ayurvédica superior del Retiro Shreyas, destacó que incluso los principiantes pueden practicarla con la ayuda de una silla o una pared, lo que la hace accesible para todos.
LA NACION